El narrador, o narradora, es la voz que cuenta la historia, los ojos a través de los que miramos, los oídos a través de los que oímos, la piel a través de la que sentimos...
El narrador no se puede confundir nunca con el escritor.El narrador es un personaje en sí mismo, o incluso varios personajes a la vez, incluso cuando se escribe en primera persona. Se construye del mismo modo que construimos los personajes en sí, pero su función es la más importante, su visión, su forma de entender e interpretar, son claves para la consecución del relato.
Veamos un ejemplo en "La historia interminable" de Michael Ende. La historia comienza siguiendo a Bastian y contando cómo consigue el libro y se esconde para poder leerlo. Este narrador está representado con el color rojo. Cuando empieza a leer la historia aparece un nuevo narrador, el del libro en sí, que se expresa con el color verde. Además, a lo largo del libro van apareciendo personajes que a su vez cuentan historias. Cada cual tiene su propia voz, todas ellas hacen que vayan introduciéndonos en la novela y conociendo los personajes y cuanto ocurre.
Todo se ve según el cristal con que se mira.Existen tres tipos básicos de narrador, aunque luego, cada uno de ellos tiene diferentes subtipos en los que hoy no vamos a entrar. Si has hecho el ejercicio anterior, habrás elegido uno de los tres.
NARRADOR OMNISCIENTE: Lo conoce todo, pero cuenta lo que interesa en función de la historia. Tiene una visión total. Puede narrar de manera "cinematográfica", o sea, contando solo aquellos que es perceptible, o entrar dentro del las emociones y pensamientos de los personajes. Enfocarse en uno de ellos o en varios. "La historia interminable" es un ejemplo de este tipo de narración.
NARRADOR PROTAGONISTA: La voz que narra es la del protagonista de la historia. Cuenta las cosas desde su perspectiva personal. Su visión es más limitada pero nos hace más fácil ponernos en su lugar. Las autobiografías suelen estar narradas así, pero también muchas otras historias dándole verosimilitud. Veamos el ejemplo de "El hombre invisible", de Ellison
"Soy un hombre invisible. No, no soy uno de aquellos trasgos que atormentaban a Edgar Allan Poe, ni tampoco uno de esos ectoplasmas de las películas de Hollywood. Soy un hombre real, de carne y hueso, con músculos y humores, e incluso cabe afirmar que poseo una mente. Sabed que si soy invisible ello se debe, tan sólo, a que la gente se niega a verme. Soy como las cabezas separadas del tronco que a veces veis en las barracas de feria, soy como un reflejo de crueles espejos con duros cristales deformantes. Cuantos se acercan a mí únicamente ven lo que me rodea, o inventos de su imaginación. Lo ven todo, cualquier cosa, menos mi persona."
NARRADOR TESTIGO: La historia es contada por un personaje secundario: un amigo, un pariente, alguien que sabe lo que pasó o conoce a otros personajes que le han ido revelando la historia. Es la visión más limitada, pero puede apoyarse en diálogos y relatos de otros lo que aporta múltiples puntos de vista.
En las novelas de Sherlock Holmes, de Arthur Conan Doyle, Whatson es el narrador de las historias y le da su particular punto de vista.
Conocer los narradores nos ayuda a elegir lo que nos interesa más para la historia, dependiendo de aquello en lo que queramos hacer hincapié.
Para saber más:
https://www.literautas.com/es/blog/post-736/el-narrador-1-la-voz-de-l-historia/
https://narrativabreve.com/2016/01/no-hay-que-confundir-al-narrador-con-el-autor.html
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